Qué ver en el norte de Fuerteventura: paisajes, playas y pueblos con encanto
El norte de Fuerteventura es una región de contrastes donde el paisaje volcánico y desértico de la isla se funde con playas de arena dorada y aguas cristalinas. Si estás planeando una visita, es normal que te preguntes: ¡¿Qué ver en el norte de Fuerteventura?! En este artículo, te guiaremos por los mejores lugares, playas y actividades para que aproveches al máximo tu viaje. ¡Sigue leyendo y descubre por qué esta zona de la isla es una joya imperdible!

¿Para quién es esta guía? Esta guía es ideal para quienes se alojan en el norte o el centro de Fuerteventura y desean explorar esta zona con calma. También es perfecta para viajeros que visitan la isla durante una semana y quieren descubrir paisajes, playas salvajes y algunos de los pueblos más bonitos de la isla de Fuerteventura, pero separando su itinerario por zonas. Por lo que aquí nos centraremos en las cosas que ver en el norte de Fuerteventura.
¿Cómo es el norte de Fuerteventura?
El norte de Fuerteventura se caracteriza por tener un paisaje desértico y volcánico que se mezcla con extensas playas de arena dorada y aguas turquesas. Aquí encontrarás una impresionante y gran extensión de dunas en el Parque Natural de las Dunas de Corralejo, malpaíses de roca oscura creados por antiguas erupciones volcánicas y acantilados en la costa oeste que se asoman al Atlántico.
La aridez del terreno, salpicado de pequeños pueblos dispersos en interior y litoral de la isla, recuerda la esencia más pura de Fuerteventura, mientras que la brisa constante y el oleaje convierten la costa norte en un paraíso para los amantes del surf y los deportes acuáticos.
Pero más allá de las playas, el norte de la isla esconde lugares únicos como el islote de Lobos, un pequeño paraíso natural protegido accesible en ferry desde Corralejo, o los valles áridos del interior, donde los molinos de viento y las llanuras desérticas crean una postal inolvidable. Es una región perfecta para quienes buscan aventura, tranquilidad y la belleza salvaje de Fuerteventura en su estado más puro.
Mapa de sitios que ver al norte de Fuerteventura
Lugares imprescindibles que visitar en el norte de Fuerteventura
El norte de Fuerteventura esconde rincones espectaculares que combinan naturaleza, historia y paisajes únicos. Aquí encontrarás playas salvajes de arena dorada y aguas cristalinas, pequeños pueblos con encanto o espacios naturales protegidos dignos de explorar. Esta parte de la isla ofrece una gran variedad de lugares que no te puedes perder. A continuación, te mostramos los imprescindibles que harán que tu visita al norte de Fuerteventura sea inolvidable.
Parque Natural de las Dunas de Corralejo
El Parque Natural de las Dunas de Corralejo, en Fuerteventura, es uno de los lugares que no te puedes perder. Sus 2.600 hectáreas ofrecen un paisaje único de dunas doradas que contrastan con el azul intenso del océano. Es un destino ideal para los amantes de la naturaleza, el senderismo y los deportes acuáticos, como el surf y el kitesurf. Además, su biodiversidad incluye especies protegidas y una rica fauna adaptada a este entorno árido.

Ubicado al noreste de la isla, este espacio protegido alberga playas vírgenes perfectas para relajarse o disfrutar de espectaculares puestas de sol, conocidas en su conjunto como Grandes Playas de Corralejo. A poca distancia se encuentra la Isla de Lobos, otro rincón natural imprescindible. La zona cuenta con fácil acceso desde Corralejo y es un punto clave para quienes buscan experiencias auténticas en Fuerteventura. Si quieres descubrir más acerca de este sitio, no te pierdas nuestro artículo sobre las Dunas de Corralejo.
Corralejo y su casco antiguo
Aunque hoy Corralejo es un destino turístico con hoteles, apartamentos y un ambiente animado, aún conserva rincones que recuerdan su pasado como pequeño pueblo de pescadores. Más allá del bullicio de sus playas y la vida moderna, en los alrededores del Muelle Chico y el puerto todavía se respira su esencia marinera. Sus callejuelas estrechas y empedradas te transportan a otra época, cuando los pescadores descargaban sus capturas y el aroma a sal y mar impregnaba el aire.

Las fachadas blancas de sus casas bajas contrastan con el azul intenso del Atlántico, mientras pequeños bares y tabernas te invitan a probar pescado fresco acompañado de un buen vino canario. Es el lugar perfecto para un paseo sin prisas, dejándote sorprender por el encanto auténtico de la Fuerteventura más tradicional. El puerto, aún latente con su esencia pesquera, es el punto de encuentro de locales y viajeros que parten hacia la Isla de Lobos o Lanzarote, la isla vecina. A su alrededor, las terrazas cobran vida con música en directo y un ambiente relajado donde disfrutar del atardecer con vistas al océano.
Isla de Lobos
Vale. Este lugar no está territorialmente en Fuerteventura. Se trata de otra isla pero ubicada al norte de Fuerteventura. La Isla de Lobos es un pequeño islote de unos 4,5 km2 conocido por su paisaje volcánico, aguas cristalinas y su rica biodiversidad. ¡Todo un paraíso! Para visitarla, es necesario tomar un ferry desde Corralejo y obtener un permiso, ya que el acceso está regulado para preservar su entorno natural. Entre sus principales atractivos destacan la Playa de la Concha, con su arena dorada y aguas tranquilas, el sendero hasta la Montaña La Caldera, que ofrece vistas impresionantes del Atlántico, y el Puertillo de Lobos, una especia de piscina natural con agua azul cristalino. ¡Toda una perla!

Además, la isla cuenta con rutas de senderismo bien señalizadas que permiten recorrer su territorio en pocas horas, pasando por el Faro de Martiño y zonas de gran valor ecológico como el pequeño saladar que encontramos a los pies del faro. No hay alojamientos en la isla, por lo que las visitas se basan en excursiones diurnas y es recomendable llevar provisiones, aunque en el Puertillo de Lobos hay un chiringuito donde se puede comer. Su tranquilidad y belleza la convierten en un destino ideal para los amantes de la naturaleza.

¿Te estás preguntando por qué se llama “Islote de Lobos”?¿Cómo obtener el permiso?¿Cómo y donde comprar el ticket del ferry?¿Y cuánto cuesta?¿Qué llevar? Pues no te pierdas nuestro artículo con toda esta información y demás consejos para tu viaje.
Lajares y Calderón Hondo
Lajares es un pequeño pueblo al norte de Fuerteventura, situado entre Corralejo y El Cotillo. Conocido por su ambiente relajado, es un punto de encuentro para surfistas, artesanos y amantes de la naturaleza. Sus calles están salpicadas de tiendas de artesanía y acogedoras cafeterías, haciendo que este pueblo sea una parada perfecta para tomar un respiro y un delicioso café.
Uno de sus principales atractivos son los molinos de viento, testigos del pasado agrícola de la isla, aunque también destaca la Ermita de San Antonio de Padua, un templo del siglo XVIII con un bonito retablo de madera en su interior. Cada sábado, el Mercadillo de Lajares cobra vida con puestos de cerámica, joyería artesanal y productos ecológicos.

A escasa distancia de Lajares se encuentra el volcán Calderón Hondo, uno de los cráteres mejor conservados de la isla. La ruta para llegar a su cima es relativamente sencilla, con un recorrido circular de unos 5 km. A medida que se asciende, se pueden disfrutar vistas panorámicas de la costa norte de Fuerteventura, así como del conjunto de conos volcánicos que conforman el paisaje de la zona. El punto culminante de la ruta es el impresionante cráter de 70 metros de profundidad, desde donde es posible observar los tonos rojizos y ocres de la roca volcánica.
Para disfrutar de la caminata por Calderón Hondo, se recomienda llevar calzado cómodo, suficiente agua y evitar las horas centrales del día en verano debido al calor. Esta excursión es ideal para quienes buscan una actividad al aire libre en un entorno volcánico único. Recuerda que los espacios naturales son un patrimonio que debemos proteger: no dejes basura ni restos de comida, respeta el sendero y sigue las normas establecidas por las autoridades para garantizar su conservación. Solo así futuras generaciones podrán seguir disfrutando de este paisaje extraordinario.
Majanicho y la costa norte
Majanicho es una pequeña aldea donde el tiempo parece que va a otro ritmo. Una secuencia lenta. Alejada del bullicio de las ciudades. Este pequeño pueblo de pescadores, ubicado en la costa norte de Fuerteventura, en el municipio de La Oliva, es una de las aldeas más auténticas de la isla. Sus casas blancas con ventanas y puertas azules se distribuyen alrededor de una bahía de aguas cristalinas, donde las barcas de pescadores flotan al compás de la marea.

Aquí no encontrarás hoteles, ni tiendas, ni restaurantes. El principal atractivo de Majanicho es su ambiente tranquilo y su conexión con la naturaleza. Es el lugar ideal para sentarse junto al mar, observar a los pescadores limpiar sus capturas o simplemente disfrutar de la brisa atlántica sin prisas ni distracciones. Un momento de paz. ¡Un respiro! Eso sí, algo curioso es que en el centro del pueblo nos podemos topar con una pequeña iglesia, la de Nuestra Señora del Pino. En fin, Majanicho es un rincón salvaje en la costa norte de Fuerteventura, un lugar transitado por surfistas en busca de spots donde surcar las impresionantes olas que ofrece esta isla.
El Cotillo y sus encantos
El Cotillo es un pequeño pueblo marinero en el noroeste de Fuerteventura que ha sabido conservar su esencia pese al auge del turismo. Sus casas blancas, las calles tranquilas y el ritmo pausado de la vida local hacen que sea un destino perfecto para quienes buscan desconectar. En su costa se encuentran algunas de las playas más espectaculares de la isla, como la playa de la Concha y la playa de los Lagos, con aguas cristalinas y arenas doradas, ideales para el baño y el relax. Aunque las playas del sur como la playa del Castillo o la playa de La Escalera, son más grandes y salvajes, por lo que suelen estar menos concurridas.

Más allá de sus playas, El Cotillo ofrece rincones llenos de historia y tradición. La Torre del Tostón, una antigua fortificación del siglo XVIII, regala vistas impresionantes del litoral y alberga exposiciones culturales. También destaca el Faro del Tostón, donde se encuentra el Museo de la Pesca Tradicional, un espacio que muestra la estrecha relación de los majoreros con el mar. Y para completar la experiencia, nada mejor que disfrutar de la gastronomía local en los restaurantes del puerto, donde el pescado fresco es el gran protagonista.
La Oliva, antigua capital de la isla
La Oliva, situada en el norte de Fuerteventura, fue la capital de la isla entre 1836 y 1860, un período en el que se consolidó como el centro político y económico de la región. Esta localidad destaca por su arquitectura tradicional, reflejo de su pasado señorial, con edificios emblemáticos como la Casa de los Coroneles, una de las construcciones más representativas de la isla. También alberga la Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria, un templo de estilo mudéjar con toques de la arquitectura local, cuya construcción se inició en el siglo XVI, siendo testigo de siglos de historia.

© Xosema, Iglesia de Nuestra Señora de la Candelaria – La Oliva – Fuerteventura – 1, CC BY-SA 4.0
Además de su riqueza patrimonial, La Oliva se encuentra en un entorno privilegiado rodeado de maravillas naturales como la Montaña de Tindaya, el Monumento Natural del Malpaís de la Arena o las famosas Dunas de Corralejo. Su economía, que en el pasado se basaba en la agricultura y ganadería, ha dado paso a un sector turístico en crecimiento, complementado con una oferta gastronómica destacada. Visitar La Oliva es sumergirse en la historia de Fuerteventura mientras se disfruta de su naturaleza y su cultura.
Villaverde y sus molinos de viento
Villaverde, un encantador rincón del norte de Fuerteventura, se encuentra estratégicamente ubicado entre la histórica La Oliva y la animada Corralejo. Este pequeño pueblo, rodeado de paisajes volcánicos y tierras fértiles, ha sabido conservar su esencia rural mientras se convierte en un destino gastronómico de referencia en la isla. Uno de sus mayores atractivos son sus dos molinos de viento centenarios, situados en lo alto de la montaña del Molino. Restaurados con esmero, estos ingenios harineros evocan el pasado agrícola de Fuerteventura y ofrecen unas vistas panorámicas inigualables del Atlántico y la vecina Lanzarote.

Además de su valor histórico, Villaverde es un destino ideal para los amantes de la buena mesa. Aquí se encuentran algunos de los mejores restaurantes de la isla, donde la cocina majorera alcanza su máxima expresión con platos elaborados con productos locales. Lugares como Casa Marcos o El Horno son paradas obligadas para disfrutar de carnes a la brasa, quesos artesanales y pescados frescos. Eso sí, es recomendable reservar con antelación, especialmente en temporada alta. Si quieres planificar una ruta de senderismo antes, la Montaña Escanfraga espera con sus senderos entre volcanes, ofreciendo una experiencia inolvidable en plena naturaleza.
Tindaya, montaña sagrada y mirador de Vallebrón
Tindaya, conocida como la montaña sagrada de Fuerteventura, es un lugar lleno de historia y misticismo. Se piensa que los antiguos aborígenes la consideraban un sitio de gran valor espiritual, ya que contiene más de 300 grabados podomorfos (en forma de pie) hallados en sus laderas. Su silueta solitaria en el árido paisaje majorero la convierte en un icono natural, y su roca de tonos ocres cambia de color según la luz del día.

Aunque el ascenso está restringido para preservar su valor arqueológico, se puede admirar su majestuosidad desde los alrededores o desde miradores cercanos, como el mirador de Vallebrón, que ofrece una de las vistas panorámicas más impresionantes de Fuerteventura. Desde su plataforma se puede contemplar un paisaje de llanuras ondulantes, barrancos y el océano en el horizonte. Es un punto ideal para apreciar la geografía de la isla y disfrutar de un atardecer espectacular. Para llegar al mirador, hay un aparcamiento donde puedes estacionar tu vehículo y subir una cuesta de unos 10-15 minutos para tener las mejores vistas y, ¡voalá! Tindaya a tus pies.
Puertito de los Molinos
Escondido entre acantilados de la costa oeste de Fuerteventura, el Puertito de los Molinos es un remanso de paz con el encanto de los pueblos pesqueros de antaño. Sus pocas casas encaladas, levantadas con piedra, arena y cal, reflejan la esencia de un lugar moldeado por la tradición. Durante siglos, la industria de la cal fue clave en la zona, y aún hoy se pueden encontrar restos de antiguos hornos. La playa, cambiante con las mareas, es un espectáculo natural: en bajamar revela una franja dorada de arena fina, pero con pleamar se cubre de callaos y se funde con el Atlántico bravo. No es la mejor opción para el baño, pero sí para disfrutar de la belleza salvaje del paisaje.
Uno de sus secretos mejor guardados es la Cueva de Herminia, un sistema de grutas marinas que solo se deja ver en las mágicas “mareas del Pino” de septiembre y octubre. En esos días, la bajamar descubre un laberinto de formaciones rocosas que parecen sacadas de otro mundo, aunque siempre conviene vigilar el estado del mar. A pesar de su pequeño tamaño, el pueblo cuenta con dos restaurantes donde el pescado fresco se sirve con vistas al océano, y una pequeña ermita donde se venera a la Virgen del Carmen, la patrona de los marineros. La verdad que El Puertito de los Molinos es uno de los lugares que merece la pena visitar en el norte de Fuerteventura.
¿Qué hacer en el norte de Fuerteventura? (planes y actividades)
A continuación te proponemos una serie de planes por si te apetece hacer algún tipo de actividad en la zona norte de Fuerteventura:
12 planes que hacer al norte de Fuerteventura
El norte de Fuerteventura te espera
El norte de Fuerteventura es un destino que combina playas paradisíacas, paisajes insólitos y pueblos con encanto. Ahora que conoces los mejores lugares que ver en el norte de Fuerteventura, solo te queda preparar tu viaje y disfrutar de esta joya canaria. ¡No te lo pierdas! Y si aún dudas entre el norte o el sur, o simplemente quieres dividir tu viaje a Fuerteventura por zonas, no te pierdas nuestro artículo sobre qué ver en el sur de Fuerteventura.
Si quieres saber más sobre cuál es la mejor época para viajar a Fuerteventura, cómo es el clima, dónde alojarse, qué llevar, cómo moverse y demás tips de viajes, no te pierdas nuestro artículo sobre consejos para viajar a Fuerteventura.